Las personas que desempeñan labores manuales, cuyas tareas diarias demandan un esfuerzo corporal pleno y requieren una elevada capacidad física, deben reducir la sobrecarga. Sin embargo, eso no suele resultar sencillo en el trabajo o la obra en construcción. El punto más débil es la espalda, porque los grandes pesos, las malas posturas y las cargas unilaterales pueden afectar la columna vertebral de forma significativa y causar dolencias.
Por lo tanto, el mismo precepto es válido para todos los oficios manuales. Quien quiera cuidar su espalda, debe trabajar con herramientas específicas para ello. Desde luego, esto también ocurre en el ámbito de los trabajos artesanales, donde la combinación de esfuerzos poco habituales y herramientas no ergonómicas puede tener sus consecuencias.
Los siguientes enlaces le indicarán cuáles son los aspectos a los que debe prestar atención: